4
Y oré á Jehová mi Dios, y confesé, y dije: Ahora Señor, Dios grande, digno de ser temido, que guardas el pacto y la misericordia con los que te aman y guardan tus mandamientos;
compare_arrows
Comparar Traducciones
Porque el yugo que pesaba sobre ellos, y la vara que hería sus hombros, y el bastón de su exactor, Tú los hiciste pedazos, como en el día de Madián.